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Mis inicios se remontan a la fotografía de naturaleza desde la que he ido poniendo en valor ser atento, discreto y respetuoso. Así es como seré el día de vuestra boda.
Disculpad, me llamo Víctor Santacruz, también soy marido y padre. La fotografía y la familia son mi máxima devoción. La pasión no tiene límites, tampoco la entrega día a día a lo que más deseo.
Desde lo más importante a lo más anecdótico, desde lo más formal a lo más extravagante. Todo cuenta para un día tan irrepetible y memorable como el de vuestra boda, ¿verdad?
Desde el principio hasta el final ningún invitado quiere perderse nada. Yo tampoco.
Lo impreso en la retina perdura, pero también lo impreso en papel. Construyamos un álbum, hagamos un libro que dé vida a los recuerdos.
Más allá de lo que recordemos, facilitemos que los momentos vividos se hagan muy presentes.
¿Queréis romper el hielo con la cámara? Hagamos un preboda y creemos así vuestro primer recuerdo antes de la boda.
¡Fuera tensiones, soltaros! Si os pasa por la cabeza un postboda buscaremos un lugar excepcional para conectar con vuestra energía una vez casados.